El pasado jueves 14 de junio acabó mi ruta en el Canarias Lee, el plan de fomento de la lectura entre jóvenes del Gobierno de Canarias. En total visité 18 institutos y centros de educación obligatoria, en los que charlé con los alumnos que previamente se habían leído mi novela Wishbone (17 centros) y Doce campanadas (1 centro, en Gran Canaria).
Gracias al Canarias Lee he vivido una experiencia preciosa que para todo escritor representa lo mejor que te puede ocurrir: ver cómo tu obra va cobrando vida gracias a aquellos que la leen. Entre los alumnos hubo de todo, aunque por regla general me trataron a las mil maravillas: algunos con más interés que otros, muchas preguntas, alguna que otra duda, observaciones, sugerencias… Y lo mejor es que siempre había alguien que te miraba con un brillo especial en los ojos, y al que no tardabas en identificar como a otro compañero de fatigas. Da gusto ver que por ahí afuera hay mucha, muchísima gente que escribe. Solo espero que esta experiencia para ellos haya supuesto romper una barrera, dejar de ver al escritor como un ente extraño y constatar que es una personal normal y corriente, para que se animen también a contar sus historias.
Si algún alumno/a está leyendo esto, ya saben: ¡a seguir creando, escribiendo, sin rendirse, con ganas e ilusión! :)
El Canarias Lee también me ha permitido conocer rincones de las islas Canarias que desconocía y buscarme las castañas yo sola para llegar a ellos. Le he perdido el miedo a conducir un coche que no sea el mío a base de alquilar vehículos en otras islas para poder desplazarme, e incluso me he recorrido prácticamente entera la isla de La Gomera yo sola por carretera. Un lugar precioso, pero con unas carreteras que agüita.
Ha sido duro y cansado, pero me siento privilegiada por haber tenido esta oportunidad. Me daría pena que el Canarias Lee no vuelva a hacerse por falta de presupuesto, espero que no sea así. O al menos que los centros reutilicen los libros que ya forman parte de sus bibliotecas.
Para concluir, hago un pequeño resumen de las preguntas que más se repitieron sobre Wishbone a lo largo de esta ruta de casi 4 meses de duración, aunque 15 de los 18 centros los visité entre mayo y junio.
- ¿De dónde viene el título?
- ¿De que muere cierto personaje, por qué no se especifica?
- ¿Está basada la novela en una historia real?
- ¿En qué te inspiraste para escribirla?
- ¿Cuánto tiempo tardaste en escribirla?
- ¿Qué significa la portada?
- ¿Has estado alguna vez en Finlandia?
- ¿Cuánto ganas con cada libro? (esta me la hicieron en todos los centros xD)
Y así se cierra esta pequeña etapa con el final de curso. Ahora, al igual que los sufridos alumnos, ¡a descansar! Entre comillas, pero ya me entienden. Si es que he cogido más aviones entre esto y el viaje a Japón en lo que llevamos de año que en toda mi vida…
